Evita el impacto del polvo y la suciedad en la salud respiratoria de tus mascotas y de otros miembros de tu familia con la limpieza regular de tus espacios, así tendrás lomitos y michis respirando tranquilos… y sus dueños también.
La salud respiratoria de tus mascotas es uno de esos aspectos que pensamos son de dominio de los veterinarios, sin embargo, dueños y cuidadores podemos jugar un papel cuidando el bienestar de los cuadrúpedos que comparten su vida con nosotros.
¿Qué pueden afectar la salud respiratoria de tus mascotas?
- Alergias: así como pasa con los humanos, el polen de algunas plantas afecta a nuestras mascotas durante la primavera y el verano. Dependiendo del lugar, plantas como el zacate poa (Poa pratensis) y el pasto (Phleum pratense) pueden afectar el sistema respiratorio de las mascotas. Al interior de casa, el moho causado por la humedad y la oscuridad también puede afectar el sistema respiratorio de gatos y perros.
- Parásitos: no es común pero un ácaro llamado Pneumonyssoides caninum puede albergarse en las cavidades nasales de los perros y el gusano llamado Paragonimus kellicotti se puede albergar en los pulmones de algunos mamíferos domésticos.
- Virus: algunos adenovirus y el virus de la parainfluenza pueden desencadenar flujos nasales y dificultades para respirar en perros, gatos y otros mamíferos.
- Sustancias irritantes: limpiadores, desinfectantes, destapacaños y suavizantes de telas pueden contener sustancias que afectan la salud respiratoria de las mascotas al causarles desde malestares como tos y estornudos hasta daños en las paredes de la laringe y los pulmones.
- Traumas: impactos causados por caídas o lesiones por choques pueden afectar el funcionamiento de músculos como el diafragma, responsable de la respiración de nuestras mascotas y cuyo daño puede afectar negativamente la salud respiratoria de la mascota al disminuir el suministro de oxígeno al organismo.
Para mantener la salud respiratoria de nuestras mascotas en óptimas condiciones, además de las visitas periódicas al veterinario, existen indicios como episodios de tos, estornudos o flujo nasal que se extienden por largo tiempo. Otros síntomas como la pérdida de apetito o el aletargamiento de nuestras mascotas podrían indicar problemas en su salud. Mantente atento y ve al veterinario ante cualquier conducta fuera de lo normal.




